Cuando las energías de cambio están llegando...
Momentos de auto-liderazgo, ¿estoy auto-gestionando mi equilibrio personal?
Un estilo de liderazgo basado en el coaching nos exige que conectemos en el plano humano y más allá de la tarea (ser antes que hacer) y que abandonemos la creencia de que el líder es “el experto” que ha de decir a todos los demás cuál es la mejor manera de hacer las cosas. El coaching se basa en la confianza, en la seguridad y en el no juzgar al otro; es una cultura en la que las “mejores prácticas” no son las que conocemos, en la que el placer es esencial para que el aprendizaje y los tropiezos se conciban como oportunidades. Es un lugar en el que todo es posible y la colaboración es la facilitadora definitiva.
-John Whitmore-
¿Tienes 1 minuto para explorar y experimentar distintas actitudes?
Acomódate en un lugar donde nadie pueda interrumpirte durante unos instantes.
Piensa en la situación actual e intenta adoptar las siguientes actitudes sucesivamente.
Mantente en cada una de ellas durante tanto tiempo como te sea posible antes de pasar a la siguiente y presta atención a las respuestas que evocan en ti:
- Creo que esta sociedad es un problema.
- Creo que esta sociedad tiene un problema.
- Creo que esta sociedad está en un proceso de aprendizaje y que es capaz, tiene recursos y está llena de potencial.
¿Qué has notado en cada una de las actitudes?
¿Qué emociones o sentimientos ha despertado en ti cada una de ellas?
¿Qué opinión tenías del potencial de esta sociedad en cada uno de esos momentos?
¿Qué ha cambiado en tu actitud?
¿Qué actitud tiendes a adoptar a diario?
Piensa que eso que tú crees, de una forma u otra, se comunica al resto, hables o no. Tu comunicación verbal es de un 7%, el tono de voz un 38% y la no verbal un 55%. Tu actitud consciente o inconsciente comunica sí o sí, con lo cual reflexiona y date cuenta de aquello que crees, piensas o haces, porque está llegando a tu entorno inmediato. De aquí la importancia de una actitud positiva.
A mí me gusta interpretar, hacer teatro. Es porque la actitud negativa antes de ser cambiada y pasada a nuestro competente inconsciente (“no sé qué sé, pero cuando necesito saber sí sé”, según Maslow), precisa que interpretemos un papel (la situación positiva, actitud de cambio), que a través de la repetición, acabamos integrando como un nuevo hábito. Lo más importante es que es para nuestro propio beneficio, es decir, que nos ayuda a evolucionar de forma positiva, proactiva, nos impulsa hacia una versión propia mejorada. De este aprendizaje y cambio nos llevamos una nueva habilidad, que desde la auto-observación y después pasada a la acción (que para más “INRI”) impacta en nuestros entornos inmediatos. Si tú cambias, tu entorno cambia.
Así entonces, te invito a que hagas el ejercicio, que hagas el teatro pertinente que te lleve al cambio. Esta puede ser la forma más inmediata que tienes de ayudar a los demás.
Te puedes preguntar: ¿Cómo lo hago?
Bien, ponle intención consciente a lo que quieres comunicar, esa actitud positiva. ¿De qué forma te vas a comportar? Y, ¿qué es lo que quieres transmitir? ¿Cuáles son los gestos que vas a utilizar o cuál será tu fisiología que representa la nueva actitud?
La intencionalidad se proyecta hacia afuera, tal y como se percibe una emoción de tristeza en la persona, somos capaces de sentirla y preguntamos: ¿Estás bien? ¿Te ocurre algo? A la vez podemos transmitir mucho a través de una sonrisa.
Tener una intención clara acerca del resultado que queremos obtener nos acerca al éxito de la misma.
Espero y deseo que este simple ejercicio pueda sembrar una semilla, la cual brote para influir en el resto de forma positiva y creativa. Una semilla que nos haga adoptar, aún en la dificultad, una decisión de dónde queremos estar.
En ti está la elección…
con Roger.
Roger es un apasionado de la naturaleza humana. Su inquietud por explorar nuevos territorios de crecimiento y desarrollo personal le han hecho dedicarse a las personas.
Promueve el talento y la capacidad de auto-superación, a través del aprendizaje y la experimentación. Porque si nos lo proponemos, podemos cambiar las cosas y crear nuevas realidades.
Máster Internacional en Liderazgo y Business Coaching, CIE Barcelona
Máster en Inteligencia Emocional y Programación Neurolingüística UVIC, UManresa, UCC