El liderazgo como herramienta de conexión con los demás

Experiencia en liderazgo y homenaje a un gran maestro, el de la vieja escuela. Era una persona que venía de barrer el taller y paso a paso fue subiendo escalones hasta llegar a la dirección comercial. Conectaba con las personas, proponía salidas personales y grupales. Recuerdo que siempre me decía: "que nunca te vean bebiendo alcohol o jugando en las máquinas". Frase que me quedó grabada a fuego porque escondía más valor de lo que parecía.
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Confiaba plenamente, era asertivo, empático, escuchaba atentamente y fomentaba el trato familiar. Era un “face to face” constante. Esto, proporcionaba un respeto y un contacto profundo entre personas más allá del rol de cada uno. Como resultado potenciaba la implicación y la proximidad. Sí, es verdad que había mucha competencia y éste es un punto oscuro en las tareas comerciales. Remar en dirección a la colaboración por un objetivo común, más allá de lo individual, es la solución.
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La diversión es un requisito vital para conseguir un rendimiento óptimo y alcanzar objetivos, sobre todo, y muy importante: produce un estado de ánimo alto que retroalimenta continuadamente. Puedo asegurar que nos lo pasábamos en grande. Las formaciones se hacían fuera de la ciudad, se iba a Madrid. Era un premio, ampliabas red de contactos y además te formabas.
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Los conflictos y discusiones producidas por la presión y el estrés del día a día también forman parte del proceso que va del grupo al equipo. Comparativa a los matrimonios: ¿es posible no discutirse? No, ¿no? Y después viene la reconciliación. Si hacemos un re-encuadre, podemos decir que ayuda al refuerzo del vínculo. Así pues, si hemos gestionado correctamente el autocontrol, debemos valorarlo como ingrediente que hace buen caldo.
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Este proceso de un equipo lleva tiempo, con paciencia obtendremos resultados a medio-largo plazo y aseguraremos un equipo de alto impacto emocional, y por tanto, productividad, motivación y resultados positivos. Me gusta el concepto de: “family team” por la connotación de vínculo y que la creencia general sea: todos somos importantes. Creo que éste era el ingrediente secreto de este tipo de liderazgo. La situación idónea sería generar un entorno familiar donde el padre/madre (líder) marcara las pautas y permitiera que cada uno se desarrollara, participara, aprendiera y se autogestionara. De esta forma puede delegar y visualizar de forma holística todo el engranaje comercial.
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He vivido otros liderazgos y os aseguro que salir de las reuniones comerciales con la cabeza hacia abajo y con fisiología y emociones de tristeza, rabia y frustración, no ayuda a que se logren los objetivos marcados.
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Pongamos música a nuestras relaciones. Confiemos en las personas. Trabajemos las competencias técnicas y digitales pero sin olvidar la parte humana.
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¡We are a family team!

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